Quieres reformar el baño. Se ha quedado anticuado y quieres darle un toque moderno, elegante y actual. Muchos pensarán en los azulejos de las paredes, en los muebles o en el espejo, pero lo que realmente importa y marca un antes y después es la zona de la ducha y, en especial, el plato de ducha. ¿Qué color elijo? ¿De qué material y qué grosor? Son muchas las preguntas que nos rondan por la cabeza al querer hacer un lavado de cara a nuestro baño o al diseñar el de obra nueva. En este contexto, Porcelanosa se convierte en nuestra mejor aliada para orientarnos, inspirarnos y terminar formando parte de nuestro hogar.
El plato de ducha, la importancia del gran olvidado
El plato de ducha, además de ser práctico, es decorativo. Esta pieza es capaz de transformar la percepción del baño y, por lo tanto, puede mejorar el momento ducha. Eso sí, su elección no debe ser tomada en vano. Veamos todo lo que debes tener en cuenta para presumir de baño ante tus invitados.
Qué debes tener en cuenta al elegir el plato de ducha
1. Medidas
Lo primero que debes hacer es medir el hueco que hay disponible en tu baño para colocar el plato de ducha. El espacio puede ser rectangular o cuadrado, todo depende de los metros cuadrados que quieras dedicarle (los platos estándar son rectangulares y miden 120 cm x 80 cm x 5 cm). Una vez tengas claro el tamaño, toca decidir el color.
2. Colores
Sí, elegir el color del plato de ducha puede resultar difícil, o no. Todo depende de tus gustos y de tu estilo decorativo. El color negro suele ser el favorito de los amantes del estilo moderno e industrial, mientras que el blanco es para los más clásicos y minimalistas y el beige o crema para los que se identifican con el estilo rústico. Los platos de ducha claros aportan luminosidad. Los oscuros, por su parte, son más sofisticados.
3. Materiales
Ahora que ya tienes claro el tamaño y el color, pasarás a elegir el espesor, el material y la textura. Cuanto más grosor tenga el plato de ducha, más presencia tendrá, por lo que si tu baño es pequeño, mejor optar por uno extrafino.
Aunque la gran mayoría de platos de ducha son de superficie sólida por su ligereza o de cerámica por su durabilidad y su facilidad de limpieza, también puedes hacerte con uno de piedra o de obra, que son más elegantes.
¿Y en cuanto a la textura? Los hay antideslizantes y con efectos de madera o de pizarra que aportarán un toque rústico al ambiente. ¡Veamos algunos ejemplos!
Todos los tipos de platos de ducha en Porcelanosa Grupo
No hay nada como ver cada tipo de plato de ducha en imágenes para hacernos una idea de cómo queda cada uno y cuál encaja mejor en tu hogar.
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